En México, la falta de tratamiento de aguas residuales se ha convertido en un obstáculo que limita el goce pleno del derecho humano al agua. La situación actual es preocupante, debido a la deficiente gestión del tratamiento de la descarga de aguas residuales domésticas, industriales, agrícolas y pecuarias, lo que ha ocasionado altos niveles de contaminación de los cuerpos de agua superficiales y subterráneos. Esto, a su vez, pone en riesgo la salud de la población y la integridad de los ecosistemas.

De acuerdo con la CONAGUA (2019), a nivel nacional, hay 2 mil 642 plantas de tratamiento municipales que sólo tratan 141.48 m3/s de aguas residuales. Para el sector industrial operan 4 mil 698 plantas con capacidad de 144.15 m3/s, en su mayoría en grades industrias y en medianas autoabastecidas. A la microempresa le corresponde 0.8 % de plantas tratadoras, mientras que en el caso de las pequeñas empresas no cuentan con estos elementos, y la mayoría realiza sus descargas a cuerpos de aguas superficiales y redes de alcantarillado urbano. 

Se sabe que el agua está contaminada cuando alguna de sus propiedades físicas, químicas o biológicas ha sido alterada; o bien, cuando hay elementos en cantidades superiores a los niveles de seguridad para el consumo humano, el uso agrícola o industrial. Por ello, se ha incrementado considerablemente en los últimos años la implementación de diversas plantas de tratamiento de aguas residuales, que mejoren el funcionamiento del tratamiento de diversos tipos de contaminantes en varias zonas del país. 

En este sentido, empresas como SUEZ Water Technologies & Solutions han creado y propuesto tecnologías innovadoras para el tratamiento de aguas residuales, con la intención de promover el reúso del vital líquido, y así alcanzar reducciones superiores a 70 % de los consumos de agua a un costo accesible. 

Empresas como SUEZ Water Technologies & Solutions han creado y propuesto tecnologías innovadoras para el tratamiento de aguas residuales, con la intención de promover el reúso del vital líquido, y así alcanzar reducciones superiores a 70 % de los consumos de agua a un costo accesible

Por ejemplo, la planta de aguas residuales del Bosque de Chapultepec es un logro de la ingeniería de reúso y tecnologías de SUEZ, que es capaz de tratar, en un espacio reducido, un caudal de aguas residuales de 170 l/s y hacerlo apto para riego de áreas verdes, para llenar de agua los lagos recreativos, así como de inyectar agua en el subsuelo para mitigar la sobreexplotación de las aguas subterráneas de la ciudad. 

Danone, en Irapuato, y L’Oreal, en Xochimilco, son algunas otras de las industrias que también han puesto en marcha acciones concretas en materia de sostenibilidad y circularidad del agua, logrando el reúso de más de 550 m3 por día.

Expertos de la UNAM han señalado que en México sólo 57 % de las aguas residuales son tratadas correctamente, por lo que debe volverse una prioridad el tratamiento de estos líquidos que contienen patógenos no controlados, metales pesados y derivados de combustibles. Desafortunadamente, la industria ejerce una enorme presión sobre los recursos hídricos, por los impactos derivados de los vertidos de aguas residuales y de su potencial contaminante más que por la cantidad que consume en la propia producción. 

Por otro lado, se necesita poner más atención a la supervisión y vigilancia, el diseño y la aplicación de instrumentos de gestión para garantizar el adecuado tratamiento y descarga de aguas residuales en los cuerpos de agua. Los accidentes de derrama y contaminación en cuerpos de aguas nacionales aumentan los riesgos de emergencias hidroecológicas inesperados y de evolución rápida que alteran la calidad del agua, poniendo en peligro la biodiversidad acuática y a la disponibilidad de fuentes de agua para la población en general.

Los enfoques tradicionales desempeñan un papel importante en la resolución de la crisis del agua, pero cada vez está más claro que la recuperación de las aguas residuales es la clave. SUEZ Water Technologies & Solutions piensa más allá de lo convencional y puede ayudar a las industrias y municipalidades a disminuir este efecto negativo con diversas soluciones tecnológicas, además de proveer la digitalización de procesos de tratamiento que ha venido desarrollando a lo largo del tiempo. 

“Hay que actuar en conjunto y en congruencia, Gobierno, industria y ciudadanía, para erradicar la problemática de escasez de agua. Sin duda, la mayoría de las industrias requieren de la utilización del agua para alguno de sus procesos y Suez ofrece múltiples soluciones para optimizar la operación de los sistemas de tratamiento y rescate de agua residual”, comentó Juan Pablo Rodríguez, director de Ventas para Sistemas de Ingeniería de SUEZ WTS. 

Por más de 30 años, SUEZ ha contado con la tecnología necesaria para aprovechar las aguas residuales tratadas para el abastecimiento, el riego y para usos industriales en diversas aplicaciones. Su portafolios puede combinarse para alcanzar objetivos específicos en función de la fuente, la calidad y cantidad de agua deseada, involucrando sistemas de Ultrafiltración, Biorreactores de Membrana, Ósmosis Inversa, Electrodiálisis Inversa y Ozono. Incluso, en el caso de aguas más complejas, cuenta con “Zero Liquid Discharge”, a través de tecnologías como Evaporación y Cristalización, capaz de alcanzar hasta un 98 % de reutilización del agua.​