Por Marty Silverman
Una fuga de agua en tu edificio puede ser sumamente costosa. No obstante, incluso una fuga minúscula puede encontrarse mediante unas cuantas técnicas simples y puede evitarte una desagradable sorpresa de parte de tu compañía de suministro de agua. Aquí hay algunos pasos que puedes seguir antes de llamar al plomero. Entre más hagas ahora, menor será el costo de la reparación a largo plazo.
1. Revisa tu medidor
Comienza la búsqueda revisando el medidor de agua. Primero, cierra la llave del agua de tu edificio. Cierra todas las llaves de los lavamanos, y asegúrate de que los fregaderos y los lavavajillas (en caso de contar con uno) no estén funcionando. Luego, observa el medidor de agua para detectar si cambia. En caso de que sí lo haga, lo más probable es que tengas una fuga grande. Si el medidor no cambia de inmediato, espera un par de horas y vuelve a revisar. Si cambió a pesar de que todas las llaves están cerradas, es posible que se trate de una fuga pequeña.
2. Revisa los inodoros
Los inodoros pueden representar hasta 30% de tu consumo de agua. Para revisar si tienes una fuga en tu inodoro, retira la tapa del tanque y escucha con atención. Si no escuchas ningún siseo, no necesariamente significa que no hay una fuga. Haz una prueba añadiendo unas cuantas gotas de colorante al agua del tanque y espera 10 minutos. Si el color aparece en el agua de la taza, entonces tienes una fuga que permite el flujo de agua desde el tanque hacia el drenaje sin que siquiera descargues el inodoro.
3. Revisa llaves interiores y exteriores
Revisa las llaves de baños y cocinas en busca de empaques con fuga. Inspecciona en busca de oxidación o decoloración todas las conexiones accesibles del calentador de agua, del equipo de bombeo, de las mangueras y válvulas de la lavadora, ya que la presencia de éstos es un claro signo de que existe una pequeña fuga. Y las fugas no ocurren únicamente dentro del edificio. Revisa también las tomas de manguera exteriores. Si cuentas con un sistema de aspersores automático en tu jardín, considera llamar a un profesional una vez por año para que lo revise. Un sistema con una mínima fuga podría estar desperdiciando más de 20 mil litros de agua por mes.
4. Fugas ocultas en muros y bajo tierra
Revisa con regularidad la parte trasera de armarios y debajo de los lavabos en busca de moho u olores desagradables. En el exterior, busca áreas con lodo blando, césped más verde que el resto o que crece más rápido; éstos podrían ser signos de una fuga. Atenderlo con rapidez puede ahorrarte miles de pesos en reparaciones.
No tienes que ser un profesional o tener experiencia con la varilla del zahorí para encontrar una fuga. Los localizadores de fugas electrónicos están disponibles en el meracdo y se pagan solos tras unos cuantos usos.
Para más información o si tienes alguna duda, llama a los Expertos en Drenajes al 800-245-6200, o visita https://drainbrain.com/es/blog-de-drain-brain/