En una sociedad en la que la cultura de cuidado al medio ambiente y la búsqueda permanente de soluciones sustentables cobra cada vez mayor relevancia, la edificación verde se ha convertido en una de las principales alternativas que tanto la iniciativa privada como el sector público tienen para impulsar la eficiencia energética y mitigar los efectos del Cambio Climático.
Las edificaciones sustentables se erigen como símbolos de una sociedad cada vez más consciente de su entorno. Es por ello que constructores, arquitectos e ingenieros, apuesta, desde la etapa de diseño, por tecnologías que prioricen el uso inteligente de recursos; soluciones que permitan brindar el máximo confort en los espacios interiores de cualquier inmueble.
En esta misión, el impulso de los fabricantes facilitará en gran medida la integración de estos elementos. Entre los principales desarrolladores de tecnología para la edificación verde en el área de climatización se encuentra Daikin, compañía japonesa que con 99 años en el mercado ha desarrollado e implementado una serie de innovaciones encaminadas al ahorro energético, como el sistema Inverter, que reduce el consumo de energía hasta 40%; o la tecnología VRV, la cual permite reducir significativamente la huella de carbono de los edificios, minimizando así el impacto ambiental.
El beneficio más importante que los equipos Daikin ofrecen a la cultura de la edificación sustentable es la eficiencia energética, ya que este tipo de soluciones cuentan con los más altos estándares de rendimiento, los cuales, al integrarse dentro de la construcción de un proyecto inmobiliario, contribuyen a elevar la plusvalía del inmueble hasta 15%.
En este sentidlo, especialistas de BBVA han mencionado que uno de los principales factores que detonan un aumento en el valor de las propiedades es, precisamente, la eficiencia energética, ya que al integrar tecnologías de punta para la climatización, el costo por servicios de luz y agua disminuye, escenario que favorece al edificio en todos sentidos.
La edificación verde representa una gran oportunidad de transformación y avance hacía una cultura del cuidado al medio ambiente, ya que impacta de manera positiva en todo el proceso del inmueble, desde su diseño, construcción y operación, al integrar lo más reciente en tecnologías, dando como resultado una tendencia que será fundamental en los esfuerzos hacia una sociedad de consumo energético neutral e incluso Zero, como lo proyectan algunos estándares internacionales.