La UNESCO impulsa el Día Mundial del Reciclaje cada 17 de mayo, una conmemoración que suele ser enfocada en la reducción de los volúmenes de desechos y la reutilización de los materiales para la protección del medio ambiente. Sin embargo, también es una buena ocasión para hablar de cómo implementar dicha práctica en el cuidado del líquido vital más importante para la vida, el agua.
De acuerdo con los expertos de Rotoplas Servicios de Agua, “reducir, recolectar, reciclar, reutilizar, repensar, respetar, es decir, las seis erres del reciclaje de agua, son medidas útiles para transformar nuestros hábitos de consumo, lo cual es fundamental en la tarea de minimizar el estrés en las fuentes naturales de dicho recurso”.
El primer paso consiste en reducir la cantidad de agua utilizada. Según el contexto, se pueden implementar diversas medidas para dicho fin; por ejemplo, utilizar dispositivos de bajo consumo de agua en los hogares y en las industrias, así como implementar prácticas de riego eficientes que minimicen las pérdidas en su distribución.
Posteriormente, lo ideal es recolectarla y tratarla con el objetivo eliminar contaminantes y residuos, lo cual se puede lograr por medio de sistemas de recolección y tratamiento de aguas residuales.
Una vez tratada, se puede reciclar para su uso en diversas aplicaciones, como el riego, el lavado de vehículos y la limpieza de edificios. También se puede utilizar en procesos industriales y en la generación de energía.
Además del reciclaje, también se puede reutilizar en su forma original para usos no potables, como la descarga de inodoros, la limpieza de pisos y la refrigeración en sistemas de aire acondicionado.
Sin embargo, para poner en marcha dichas erres, primero es necesario partir por repensar nuestras prácticas en torno a ella y la forma en que la gestionamos, ya que existen tecnologías innovadoras que son útiles para maximizar la eficiencia al consumirla, así como para reducir la cantidad de aquella que se desperdicia.
Por último, es importante respetar el valor y la importancia del agua en nuestras vidas y en el medio ambiente. “Debemos tomar medidas para preservar y proteger los recursos hídricos, solo de esa manera podremos garantizar su disponibilidad a largo plazo”, señalaron los expertos.
Sistemas de tratamiento y reciclaje: una estrategia frente a la crisis planetaria del agua
En este contexto, las plantas de tratamiento y reciclaje de agua han ido posicionándose como una de las más efectivas estrategias para recuperar el agua usada y reutilizarla para nuevos fines, de acuerdo con lo señalado por los especialistas.
“Las plantas de tratamiento de agua residual son una solución para preservar el recurso natural más valioso que tenemos, y son la herramienta perfecta para devolverle al agua su calidad, de esa manera podemos aplicar las ‘erres’ del reciclaje al reutilizarla o reinsertarla en el medio ambiente bajo condiciones adecuadas”, agregaron los expertos de la empresa mexicana.
El saneamiento de este recurso se lleva a cabo a través de diferentes etapas en donde el agua se encuentra con distintos filtros contenidos en tanques. En la primera parte, se extraen los sólidos más grandes para después continuar por las siguientes etapas en las que se remueven las grasas y los sólidos de menor tamaño, hasta, finalmente, concluir con una desinfección cuyo objetivo es eliminar microorganismos.
“Una vez que se ha tomado la decisión de optar por este mecanismo de abastecimiento, es importante tener presente que en Rotoplas Servicios de Agua contamos con diferentes soluciones capaces de adaptarse a múltiples necesidades por medio de tecnología de punta”, concluyeron los especialistas.
En 2022, Rotoplas acumuló más de 48 mil millones de litros de agua tratada y más de 20 mil millones de litros de agua reutilizada, esto en concordancia con su estrategia de sustentabilidad que está alineada bajo los estándares bursátiles más importantes como S&P/BMV Total Mexico ESG Index e índice Dow Jones Sustainability MILA Pacific Alliance.