A pesar de los avances notables en 2024, la adopción de tecnologías de Modelado de Información de Construcción (BIM, por sus siglas en inglés) sigue siendo limitada, lo que representa una oportunidad para desarrollar herramientas que mejoren la eficiencia operativa. 

En este panorama, destacan tendencias clave: la inteligencia artificial  (AI) aplicada a software especializado y el enfoque en la sustentabilidad de los proyectos. Se anticipa un crecimiento del sector entre 3 y 5% para finales de 2024, lo que equivale a aproximadamente 175 mil millones de dólares, posicionando a la inteligencia artificial como un motor de transformación esencial.

Un ejemplo destacado es Archicad AI Visualizer, una herramienta avanzada de Graphisoft. Esta función permite generar imágenes tridimensionales detalladas en las fases iniciales del diseño, facilitando la visualización de ideas en un entorno colaborativo. Mediante indicaciones de texto, esta herramienta crea rápidamente múltiples variaciones de diseño, eliminando la necesidad de modelar manualmente cada opción y revolucionando el proceso de diseño al fomentar la creatividad y la sostenibilidad.

Archicad AI Visualizer permite generar imágenes tridimensionales detalladas en las fases iniciales del diseño, facilitando la visualización de ideas en un entorno colaborativo / © Graphisoft

La AI también optimiza la ejecución de obras. Gracias a Archicad AI Visualizer, los arquitectos pueden generar imágenes 3D de alta calidad a partir de simples indicaciones de texto. Esta innovación permite explorar diferentes alternativas de diseño, integrando detalles y contexto, lo que se traduce en un aumento significativo de la productividad en el sector.

La demanda de nuevas infraestructuras ha crecido, abarcando proyectos de energía, naves industriales, bodegas de almacenamiento y centros de distribución. Este auge resulta de la colaboración entre el gobierno y el sector privado, que trabajan juntos para desarrollar infraestructuras productivas y aprovechar la tendencia del nearshoring, facilitando la reubicación de las cadenas de suministro.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reporta que el sector de la construcción lideró el crecimiento industrial a comienzos de 2024, con un aumento del 17.9% anual en comparación con enero de 2023. En este contexto, la innovación se vuelve esencial, por lo que especialistas de Graphisoft, destacan cinco beneficios clave que la IA puede aportar al sector: 

  • Eficiencia en el Diseño: Archicad AI Visualizer permite a los arquitectos generar múltiples variaciones de diseño de manera rápida y efectiva, optimizando recursos y acortando los tiempos de presentación.
  • Construcción Automatizada: La integración de la IA con tecnologías como la impresión 3D y la robótica acelera los procesos de edificación, reduciendo residuos y mejorando la seguridad.
  •  Gestión Inteligente de Edificios: Los sistemas de IA monitorizan y ajustan automáticamente las condiciones dentro de un edificio, optimizando el consumo de energía y mejorando la experiencia del usuario.
  • Diseños Personalizados: Gracias a la IA, se pueden crear diseños que responden a las necesidades específicas de los usuarios, incluyendo accesibilidad y adaptaciones culturales.
  • Control de Calidad y Simulación: La IA ayuda a predecir y mitigar riesgos durante la construcción, asegurando que los proyectos se mantengan dentro del presupuesto y cumplan con los plazos.
Gracias a Archicad AI Visualizer, los arquitectos pueden generar imágenes 3D de alta calidad a partir de simples indicaciones de texto / ©Graphisoft

Sin embargo, la adopción de la AI presenta desafíos. Es crucial que los profesionales se capaciten en nuevas tecnologías, y las empresas deben invertir en infraestructura mientras abordan preocupaciones sobre la privacidad de los datos. Superar estos retos es fundamental para maximizar el impacto positivo de estas innovaciones en el sector.

La AI y herramientas como Archicad AI Visualizer están transformando el panorama de la construcción en México. Estas innovaciones no sólo mejoran la eficiencia, sino que también fomentan la sostenibilidad, apoyando a arquitectos y constructores en el desarrollo de proyectos que contribuyen a un entorno urbano más responsable y adaptado a las necesidades futuras.

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