Este año, el mundo aumentó sus emisiones de efecto invernadero en 2 por ciento, según estadísticas dadas a conocer en el Global Carbon Project, estudio elaborado anualmente por diversos investigadores de todo el mundo.
En éste, los investigadores determinan que a pesar de cierta estabilidad que se venía presentando en los tres años anteriores, en 2017 las emisiones de carbono alcanzaron un récord de 41 mil millones de toneladas, respecto a las 36 mil 800 millones que se registraron en 2016.
«Es una gran decepción. Con 41 mil millones de toneladas de CO2 emitidas estimadas para 2017, podría faltar tiempo para mantener la temperatura por debajo de los 2 ºC, y 1.5 ºC. Sería necesario que las emisiones alcancen su pico estos próximos años y disminuyan rápidamente a continuación”, mencionó Corinne Le Quéré, de la universidad británica de East Anglia, una de las autoras.
En información dada a conocer por el diario La Jornada, se menciona que China es el país que más afectaciones a la atmósfera ha generado, con 28 % del total de CO2; le siguen Estados Unidos, La India y la Unión Europea, que en conjunto ostenta el tercer lugar en producción. «En India, las emisiones crecieron un poco menos (+2%) pero esto debería ser temporal, advierten los investigadores. En cuanto a la UE, sus emisiones están bajando más lentamente que en la década anterior (-0.2%). Eso muestra que hay que actuar con más resolución. Hay que olvidar cualquier autocomplacencia», externaron los autores del estudio.
Bonn, oportunidad para reforzar los compromisos
El próximo vienes culminan las sesiones de la COP23, en Bonn, Alemania, en donde los mandatarios de más de 200 naciones deberán ponerse de acuerdo sobre cómo poner en marcha el pacto de París, firmado en 2015.
Ahí, los firmantes del histórico Acuerdo deben empezar a concretar el «reglamento» y lanzar un «diálogo» de un año para preparar la revisión de los compromisos climáticos nacionales, presentados por cada país.
Al respecto, Patricia Espinosa, ex embajadora de México en Alemania y actual Responsable de Clima en la ONU, aseguró que «del lado negociador hay progresos. Del lado acción hay señales positivas, pero también somos conscientes de que hay que llenar vacíos. Hay un margen para actuar, pero tenemos que hacerlo rápido».
En la agenda de esta reunión se tiene proyectado que entre los días miércoles y jueves asistan la canciller alemana, Angela Merkel; el presidente francés, Emmanuel Macron, y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.
Luego de la salida del Pacto de París, por parte del actual gobierno estadounidense, la agenda incluye estrategias para acelerar los pasos hacia la meta, comentó Teresa Ribera, directora del Instituto para el desarrollo sostenible y las relaciones internacionales (Iddri, por sus siglas en inglés): «Hay que explicar cómo se transforman las cosas, decir, por ejemplo, ‘transformamos nuestro sistema eléctrico, nuevas formas de moverse en la ciudad’. Hay muchas iniciativas locales, pero a los dirigentes no se les oye».
Por su parte, representantes de Estados Unidos aseguraron que sí están comprometidos con el cambio climático, aunque primero deben asegurarse de los procesos de otras naciones: “Queremos asegurarnos que se hace todo lo posible para apoyar el despliegue de centrales de carbón limpio; si no, los chinos van a utilizar tecnologías no eficientes”, explicó un responsable de la Casa Blanca en una conferencia telefónica con periodistas.