La correcta planeación de sistemas HVAC puede traer grandes beneficios, antes, durante y después de una instalación. En la actualidad, los grandes consumos de energía para sistemas de HVAC pueden tener una solución probada en otros ámbitos: el Comisionamiento
Por Natalia Piñeyro
¿Qué tan eficaz es el Comisionamiento? Ésta es una pregunta que quienes estamos involucrados o hemos escuchado sobre el proceso nos hemos hecho en muchas ocasiones. En realidad, se han realizado múltiples estudios tratando de evaluar su eficacia; el más importante de ellos, por el gran número de edificios analizados, fue el realizado por Evan Mills del Laboratorio Nacional de Lawrence Berkeley.1 En este estudio se analizaron 643 edificios no residenciales, un área total de 99 millones de pies cuadrados, y se llegó a la conclusión de que el Comisionamiento es la estrategia más eficaz con la que contamos para reducir costos, consumo de energía y emisiones de gases efecto invernadero (GEI) en los edificios.
La razón detrás de la eficacia del Comisionamiento es que, cuando este proceso se implementa de manera efectiva, nos permite identificar errores u omisiones que de otra manera sería difícil detectar. Por ejemplo, en la etapa de diseño, es común que mediante el Comisionamiento se puedan detectar equipos de HVAC sobredimensionados, usualmente derivado de factores de seguridad elevados o de un análisis de cargas térmicas utilizando valores default, que no reflejan la realidad del proyecto.
El problema es que un equipo sobredimensionado no sólo trae consigo un mayor costo inicial, sino que además está asociado con una menor durabilidad del sistema y una mala calidad del aire, puesto que da lugar a ciclos de refrigeración más cortos y constantes, que no permiten un adecuado proceso de deshumidificación y producen mayor desgaste del sistema.
Otras fallas que se suelen detectar mediante el Comisionamiento durante la etapa de diseño son los errores en la cuantificación de elementos, o las incongruencias en los datos del proyecto; por ejemplo, entre lo especificado en el catálogo de conceptos y planos.
Detectar estas fallas oportunamente permite que se reduzcan los tiempos de obra, ya que evita que se generen cambios o adiciones de último momento. Errores en el sembrado de termostatos y sensores; elementos que se interceptan o sobreponen; incompatibilidad entre elementos; falta de sensores, actuadores, puertos de medición, o la asignación de un área de trabajo insuficiente para el mantenimiento de sistemas, son ejemplos de otros problemas comunes que el Comisionamiento permite detectar en el diseño.
Aunque en principio los mayores ahorros producidos por el Comisionamiento son derivados de la detección de errores durante la etapa de diseño, este proceso también produce múltiples beneficios durante la etapa de construcción. De hecho, el Comisionamiento nos permite detectar durante esta etapa algunas de las fallas que ocasionan mayor costo a los edificios, como la detección de fugas de aire en ductos, sistemas de HVAC desbalanceados o cargas de refrigerante incorrectas (ver Tabla).
Otros errores comunes que se pueden detectar mediante el Comisionamiento en la etapa de construcción son fallas en la calibración y programación de equipos, conexiones eléctricas invertidas o mal ajustadas; falta de lubricación, mal sellado de elementos y otros problemas potenciales que terminarán afectando la eficacia y durabilidad de las instalaciones.
El detectar estos errores oportunamente permite que el costo de realizar ajustes y reparaciones no sea trasladado al cliente final, sino que el instalador lo resuelva previo a la entrega del sistema. Otro punto clave del proceso de Comisionamiento es la capacitación al personal de operación y mantenimiento, ya que es necesario que éste conozca las fechas y actividades de mantenimiento necesarias, tanto para la correcta operación de los equipos como para cumplir con los criterios de garantías.
Factores que limitan los beneficios del Comisionamiento
Como lo mencionábamos, el implementar un proceso de Comisionamiento de manera correcta puede reducir gastos derivados de errores de obra, mejorar la eficiencia de los equipos, producir ahorros en la operación de los sistemas, evitar reparaciones costosas, etcétera. Sin embargo, se suelen presentar algunos problemas durante este proceso que hacen que no se obtengan todos los beneficios que el Comisionamiento pudiera brindar. Aquí menciono tres de los más comunes.
Comunicación limitada con el cliente final. En ocasiones, ocurre que el contrato de Comisionamiento se realiza a través de la gerencia de proyectos o del contratista general. Si bien esto en sí no representa un problema, la falta de comunicación directa con el propietario o el cliente final sí es algo que puede limitar los beneficios. Por un lado, se requiere conocer con exactitud lo que el cliente espera; por otro, es necesario comunicar directamente al cliente los errores o fallas que se van detectando durante el proyecto, para que pueda tomar las acciones que considere pertinentes, lo cual puede incluir llamadas de atención a proveedores, deductivas, afectaciones al tiempo de la obra u otras decisiones en las que el propietario debe tener la palabra final.
Falta de tiempo para la correcta ejecución de pruebas. Las pruebas de Comisionamiento suelen ser la última actividad antes de entregar la instalación al propietario, si se extendieron los tiempos de obra, como suele ocurrir, es probable que se quiera recortar o limitar el tiempo del que se dispone para realizar pruebas; sin embargo, es importante asignar suficiente tiempo para probar los equipos y poder verificar que realmente funcionan correctamente. Adicionalmente, el que se pruebe un equipo no es garantía de que no se presentarán fallas durante la prueba, de ser así, se deberá asignar suficiente tiempo para corregir el problema y volver a probar el elemento, hasta obtener resultados satisfactorios.
Comisionamiento únicamente como requerimiento contractual. Hay ocasiones en las que se contrata un proceso de Comisionamiento únicamente para cumplir con algún requerimiento contractual, como puede ser la búsqueda de algún tipo de certificación. Esto también suele estar asociado con una comunicación limitada con el cliente final y a la asignación de recursos mínimos para llevar el proceso, incluyendo tiempo y personal, lo que lleva a que se tomen a la ligera las observaciones que se hacen o se les dé una respuesta tardía, limitando los beneficios del proceso.
La razón detrás de la eficacia del Comisionamiento es que, cuando este proceso se implementa de manera efectiva, nos permite identificar errores u omisiones que de otra manera sería difícil detectar
Natalia Piñeyro, directora de Taller Energía
Los beneficios del Comisionamiento pueden ser muchos, incluyendo el generar ahorros significativos para el proyecto, tanto en el costo inicial de las instalaciones como en la operación del edificio; sin embargo, para sacar el mayor provecho del proceso es necesario que se involucren de forma activa todos los actores importantes del proyecto, se atiendan los comentarios u observaciones que se vayan generando y se le dé prioridad al proceso. Únicamente así se obtendrán los mayores beneficios.
Referencia
1. Mills, Evan & Evan. (2009). Building Commissioning: A Golden Opportunity for Reducing Energy Costs and Greenhouse-gas Emissions. 10.2172/985240.