Un entorno seguro de trabajo puede aumentar la productividad de los colaboradores considerablemente. De acuerdo con datos de la Universidad de Harvard en colaboración con el MIT, la mejor estrategia para liderar los mercados con base en buenos resultados es tener un equipo feliz y comprometido.
Investigaciones realizadas por estas instituciones señalan que el bienestar y seguridad de los colaboradores puede aumentar las ventas en 37%, mejorar la productividad en 31%, reducir los errores de producción en 19% e incrementa la creatividad de los equipos hasta en 55%.
Bajo este contexto, la integración de tecnologías avanzadas y la adopción de prácticas innovadoras están redefiniendo los estándares de seguridad en el lugar de trabajo, pero también aumentando la productividad de las empresas, haciéndolas más competitivas en el mercado global.
Investigaciones realizadas por diversas instituciones señalan que el bienestar y seguridad de los colaboradores puede aumentar las ventas en 37%, mejorar la productividad en 31%, reducir los errores de producción en 19% e incrementa la creatividad de los equipos hasta en 55%.
De acuerdo con DuPont, la inversión en equipos de protección personal (EPP) ha demostrado ser una estrategia efectiva para reducir accidentes laborales y mejorar las condiciones de trabajo.
Si se analizan las tasas de crecimiento de inversión en el sector de la protección industrial, se podrá visualizar el aumento, no solo del interés de salvaguardar la vida e integridad física de los colaboradores de las empresas, también de generar confianza y espacios seguros de trabajo.
De acuerdo con datos de la consultora Mordor Intelligence, durante 2024 el mercado mundial de EPP creció por arriba de los 87 millones de dólares y se prevé que para 2032 esta cifra crezca hasta los 128 millones de dólares.
En este mismo estudio se revela que las empresas están invirtiendo cerca del 5% de su presupuesto total en EPP, lo que no solo cumple con las regulaciones de seguridad, también están interesadas en generar esta confianza de parte de los colaboradores, lo que implica un impacto directo en la productividad.
En un estudio de ANVL se mencionó que un entorno seguro reduce el estrés y la insatisfacción entre los empleados, lo que a su vez disminuye la rotación de personal y mejora la calidad del trabajo.
En este sentido, las empresas que invierten en seguridad no sólo protegen a sus trabajadores, también optimizan sus operaciones y reducen costos asociados con accidentes y enfermedades laborales.
DuPont señaló que la seguridad industrial es una inversión estratégica que beneficia tanto a los empleados como a las empresas. La adopción de EPP y tecnologías avanzadas no sólo cumple con las normativas, también mejora la productividad y el bienestar de los trabajadores.