Por segundo año consecutivo, Constellation Brands celebró con medios de comunicación el balance positivo que han tenido desde su llegada a México, cuando decidieron convertirse en socios de Grupo Modelo, enfocándose principalmente a la producción y comercialización de las marcas de la cerveza mexicana para el mercado de Estados Unidos, lo cual implicó la adquisición de dos plantas cerveceras, una en Nava, Coahuila, otra en Obregón, Sonora; además de la construcción de una nueva que se situará en Mexicali, y cuyo término se estima para el siguiente año.
Teniendo como sede el Museo del Papalote, en la Ciudad de México, Nina Mayagoitia, vicepresidenta de Comunicación en Constellation Brands México, recordó que el éxito de la compañía se ha basado en una comunicación que consta de pasos integrales, tales como: enaltecer la tradición cervecera de México hacia Estados Unidos, compartir la grandeza de las marcas mexicanas, su preocupación por la innovación y el mantenimiento de un portafolio premium, así como el espíritu cervecero, y el ser socialmente sustentables.
“El evento de hoy es para entablar una conversación, y estar cerca. Y para recordarles estos puntos que nos mueven al interior de la empresa cuando entablamos una diálogo con ustedes, cuando trabajamos con un cliente”, declaró la representante de Constellation, quien además acentuó que el balance financiero que registraron al término de 2018 es otro motivo para sentirse comprometidos con los 6 mil 500 empleos directos que genera Constellation Brands México.
Por otro lado, durante la celebración, la vicepresidenta de Comunicación aprovechó para hablar sobre los conflictos que ha vivido la compañía desde que en 2016 decidió construir su planta de producción en Mexicali, y que ha causado el malestar de diversas asociaciones civiles locales (como Tijuana Resiste y Resistencia de Baja California), las cuales argumentan que aquélla se construye en detrimento de las zonas agrícolas cercanas, al comprometer la poca agua de la zona.
Respecto a los derechos de agua que Constellation habría adquirido para hacer uso del agua, y de los cuales aún no se conocía el estatus, según reportó en una nota Animal Político hace unas semanas, Mayagoitia explicó que los derechos de agua referidos se compran a otros concesionarios de derechos de agua, que no los ocupan, y esos derechos se ceden al usuario nuevo, que a su vez puede proveer del recurso a un particular, como es el caso la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (CESPM), órgano que fungirá como proveedor del recurso.
“Lo que nosotros hacemos es comprarle los derechos de agua a una persona que ya no los va a ocupar; esa compra entre particulares se firma ante notario y entonces el excedente de los derechos se los cede a CESPM; ese trámite ante Conagua lo hace CESPM no nosotros, porque el que recibe los derechos son ellos. Entonces cuando dice Conagua `Yo no tengo ningún registro de Constellation´ es correcto, ya que la sesión de derechos se está otro nombre”, refirió.
Aseguró que la compañía hasta el momento cuenta con una lista de 25 contratos, los cuales están firmados ante notario en la compraventa de derechos de agua, además de algunos otros pendientes por firmar. “Es un proceso que toma mucho tiempo, para que los derechos salgan a nombre de CESPM pueden pasar varios años, pero Conagua ya tiene los registros”, aclaró. La representante de la marca enfatizó que en todo momento han sido una empresa que ha cumplido con los requerimientos legales del estado, y que han sido responsables de cumplir como una compañía que recibe y paga las tarifas establecidas por el uso de este recurso. “Todo está conforme a la ley, todas las empresas que hoy reciben agua que está suministrada por CESPM tienen contrato. Y pagaremos nuestro servicio con una tarifa industrial”.
En este sentido, la integrante de Constellation Brands supone que los conflictos que han tenido con las asociaciones civiles, se corresponden con el inicio de un nuevo periodo para la localidad con la instalación del parque industrial del que formarán parte. “Mexicali está arrancando el parque industrial con nosotros, estamos abriendo camino y nos ha tocado cargar con todo el contexto que implica. Nuestra visión es que tenga un impacto positivo para todas las empresas del parque, no sólo para nosotros. Nosotros estamos comprometidos con México, y tenemos un plan de inversión que estamos cumpliendo al pie de la letra”, finalizó.
Agua sí, cerveza no
Afuera del Papalote Museo del Niño, un pequeño grupo de la organización civil Resistencia de Baja California se manifestó en contra de las acciones que Constellation Brands ha realizado en Mexicali para obtener los recursos hídricos suficientes para la producción de cerveza con destino al mercado de Estados Unidos.
En declaraciones a este medio, el activista Polo Bejarano aseguró que la construcción de la planta en el valle de Mexicali representa un ecocidio para la zona, pues hay 160 mil hectáreas que no producen porque carecen de agua, además de diversos municipios que también carecen de este insumo. Asimismo, refirió que estos problemas podrían equiparase en un futuro cercano a los problemas que enfrentan estados como Zacatecas o Coahuila, por la escasez de agua.
“No queremos caer en ecocidio. Ellos están haciendo una desoladora que se traducirá en 14 mil toneladas de salmuera. Si vieres 14 mil toneladas de salmuera al mar lo llevas al ecocidio. Nos vamos a quedar sin mar, sin playas, y sin vida marina. Sin cervecera tenemos el agua suficiente,” externó.
De mismo modo, el activista aseguró que el Río Colorado entrega anualmente 10 mil millones de metros cúbicos de agua, además de los 5 mil millones que se extraen de los pozos; mientras que sólo la planta cervecera requerirá anualmente 20 mil millones de metros cúbicos de agua, “o sea que van a sobre explotar la tierra, en un estado que ocupa el cuarto lugar en sequías”.
Sobre que la construcción de dicha planta sea en Mexicali, aseguró que se realiza estratégicamente ahí por el desemboque del Río Colorado, sin que Constellation considere el tratado de distribución de aguas de 1944, y en el que se estipula, según explica, que México recibirá el agua del Río Colorado para Baja California, mientras que Estados Unidos la recibe por Texas. “Es un tratado en el que nosotros vivimos con el agua que le sobra a Estados Unidos. Pero ahora también se quieren quedar con esa agua”.
Cabe recordar que otra asociación, Mexicali Resiste, también ha manifestado en todo momento su desacuerdo ante las decisiones gubernamentales, señalando como responsable al gobernador de la entidad, Francisco “Kiko” Vega, de favorecer los intereses de la trasnacional.