Los sistemas escolares del país han demostrado una creatividad sobrehumana y la determinación de hacer posible el aprendizaje a distancia durante la pandemia. A pesar de este gran esfuerzo, el 97% de los educadores creen que los estudiantes han sufrido al menos alguna interrupción en el aprendizaje y más de la mitad cree que la pérdida fue significativa.
No obstante, las condiciones educativas están por normalizarse, pues la Secretaría de Educación Pública (SEP) informó que para el ciclo escolar 2021-2022 han regresado a clases presenciales más de 16 millones de estudiantes de educación básica en todo el país, más 1 millón 374 mil 230 trabajadores de la educación, que se desempeñan en 156 mil 42 planteles escolares que mantienen actividades presenciales bajo cumplimiento de los protocolos sanitarios y medidas de prevención correspondientes. La propia SEP espera que en noviembre se logre el regreso a clases del 100% de los alumnos.
Antes de la pandemia a causa del COVID-19, los principales administradores escolares entendían que el mantenimiento del entorno físico de su escuela era un requisito para brindar un entorno educativo productivo. Buscaban abordar cuestiones como:
- Ausentismo causado por la transmisión del virus SARS-CoV-2
- Distracción causada por la contaminación acústica circundante
- Interferencia de los biorritmos de aprendizaje natural de los niños por elementos como luces del techo
Sin embargo, temas de bienestar como estos ahora recibirán mayor atención en un mundo posterior al COVID-19. De cara al futuro, la viabilidad de las escuelas depende tanto de la calidad de sus entornos interiores como de su plan de estudios, personal e instalaciones. Para ayudar a los estudiantes y las familias a sentirse bien con el aprendizaje en persona, en este regreso gradual a clases, los administradores escolares deben atender condiciones para demostrar y comunicar lo que están haciendo para brindar un ambiente interior óptimo.
Visibilizar la calidad del aire interior de su escuela (IAQ)
Es fácil saber cuando el techo tiene goteras o la alfombra está gastada. Sin embargo, la calidad del aire que respiramos no es tan evidente. Es humano tener miedo a lo que no puedes ver, y las partículas invisibles en el aire son ladrones de paz para los padres.
“La calidad pobre de aire interior en las escuelas puede afectar la comodidad y la salud de los estudiantes y el personal, que a su vez puede afectar la concentración, la asistencia y el rendimiento. Además, si las escuelas se tardan en reaccionar para mejorar la calidad del aire, los estudiantes y el personal están a mayor riesgo de sufrir problemas de salud a corto plazo, tales como la fatiga y la náusea, al igual que problemas de salud a largo plazo como el asma”, comenta Carlos Garcia, director general de Trane México.
“La calidad pobre de aire interior en las escuelas puede afectar la comodidad y la salud de los estudiantes y el personal, que a su vez puede afectar la concentración, la asistencia y el rendimiento. Además, si las escuelas se tardan en reaccionar para mejorar la calidad del aire, los estudiantes y el personal están a mayor riesgo de sufrir problemas de salud a corto plazo»
Carlos García, Director General Trane México
Un equipo de climatización desempeña un papel importante cuando se trata de mitigar tales amenazas. La evaluación del rendimiento y la condición de los equipos de climatización en las escuelas es un primer paso para infundir confianza en la calidad del aire interior del lugar. Un experto certificado en Calidad del Aire interior puede evaluar metódicamente qué tan bien están los sistemas de cualquier recinto. Para garantizar una buena calidad de aire en las aulas, se deben considerar cuatro acciones:
- Diluir. Asegurándose de que una gran cantidad de aire fresco del exterior diluya la acumulación de contaminantes en el interior mediante una ventilación adecuada
- Extraer. Absorber el aire es igualmente importante, especialmente el aire de cocinas, baños y sistemas de combustión
- Contener. Mantener los niveles de humedad interior dentro del rango recomendado por ASHRAE maximiza la comodidad de los ocupantes y reduce el riesgo de crecimiento microbiano
- Limpiar. Reducir la cantidad de partículas, olores o microorganismos, como moho, bacterias y virus
A través del monitoreo remoto, se pueden realizar a distancia las evaluaciones de la calidad del aire interior de cualquier espacio cerrado. A menudo, una evaluación revela que un ajuste fino o un simple mantenimiento pueden mejorar la calidad del aire significativamente.
En este sentido, se puede enviar a casa de los niños una nota o un correo electrónico a los padres destacando los hallazgos de la evaluación de su escuela y las acciones tomadas para optimizar la calidad del aire interior. Respirarán mucho más tranquilos sabiendo que se encuentran en un edificio saludable con aire limpio.
Obtener reconocimientos, respaldos o certificaciones sobre la operación del lugar también es de gran utilidad para garantizar una buena calidad de aire. Las certificaciones indican las acciones necesarias para lograr los mejores estándares y prácticas reconocidas. Los fabricantes de equipos, las asociaciones industriales y las organizaciones de salud invierten en investigación para determinar estándares efectivos de calidad ambiental en interiores. Con base en la acción tomada, muchas de estas organizaciones ofrecen reconocimientos, premios, certificados o respaldos que puede compartir con su comunidad para aumentar su nivel de comodidad.
Adoptar la tecnología educativa a menudo se considera un motivo de orgullo para un sistema escolar. En un mundo posterior a una pandemia, buscar tecnologías emergentes para abordar los problemas urgentes de calidad del aire interior significa trabajar con un asesor de confianza que lo guíe hacia las opciones adecuadas para los entornos de su escuela.
Por ejemplo, la Secretaría de Salud hace recomendaciones sobre cómo adoptar un enfoque innovador para mejorar la calidad del aire interior y garantizar un ambiente interior sano para los niños. Al mismo tiempo, apoyarse de expertos en este rubro y evaluar las condiciones de los edificios.
Existen nuevas tecnologías, como syntexis de Trane, proveedor líder de sistemas de aire acondicionado y calefacción, que toman el oxígeno y la humedad natural que existe en el aire para crear un peróxido de hidrógeno seco vaporizado que se dispersa dentro de los umbrales de seguridad aceptables en una habitación para reducir de manera continua y significativa la presencia de microbios en el aire y en las superficies. Esta tecnología es amigable para los ocupantes y administradores del edificio y representa un bajo costo de mantenimiento, además de que ayuda a mejorar la calidad del aire interior en todo el edificio, sin afectar negativamente la eficiencia energética y los costos operativos.
Un aspecto adicional que puede considerarse es fomentar el uso de equipos de climatización en las instalaciones escolares. Destacar el sistema de aire acondicionado en las instalaciones permite mostrar a la comunidad que la salud del edificio de la escuela es importante para los propietarios.
Adicional a esto, el gobierno federal plantea nueve recomendaciones para promover la seguridad, la salud y la higiene, a fin de garantizar clases seguras, responsables y ordenadas:
- Integrar y activar los Comités Participativos de Salud Escolar (CPSE) en las escuelas de niveles básico, medio superior y superior, que deberán establecer comunicación con su centro de salud más cercano cuando se requiera
- Establecer filtros de salud: en casa, en la entrada de la escuela y en el salón de clases
- Lavar las manos con agua y jabón o uso de gel antibacterial
- Usar el cubrebocas de manera correcta sobre nariz y boca
- Mantener la sana distancia
- Dar mayor uso a los espacios abiertos
- Suspender cualquier tipo de ceremonias o reuniones que concentren a la comunidad escolar
- Avisar inmediatamente a las autoridades competentes en caso de que se detecte o se sospeche que alguna persona presente algún signo o síntoma respiratorio relacionado con el virus SARS-CoV-2
- Procurar entre las y los educandos y docentes apoyo socioemocional y promover, entre otros, el curso en línea de SEP-SALUD «Retorno Seguro», en climss.imss.gob.mx