El Comisionamiento permite una mejor coordinación entre el equipo del proyecto, que deriva en la reducción de órdenes de cambio y en el cumplimiento de las fechas estipuladas en el calendario de la obra

Por Natalia Pineyro 

En 2009, Evan Mills, del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley (LBNL, por sus siglas en inglés), publicó un informe para la Comisión de Energía de California, Estados Unidos, en dónde afirmaba que el Comisionamiento es la estrategia más efectiva que tenemos para reducir el consumo de energía, costos y emisiones de gases efecto invernadero. 

Esta afirmación fue el resultado del análisis de 643 edificios, más de 9 millones de metros cuadrados de construcción. Los resultados revelaron que el Comisionamiento había permitido detectar oportunamente más de 10 mil problemas relacionados con el consumo de energía, resultando en ahorros energéticos de 16 % para edificios existentes y 13 % para nuevas construcciones, con retornos de inversión promedio de 1.1 y 4.2 años, respectivamente.  

Aunado a la reducción en el consumo de energía, se ha visto que los proyectos que implementan un proceso de Comisionamiento tienen una mejor calidad del aire interior, mayor confort térmico, mayor durabilidad de sus equipos y sistemas, y en el caso de nuevas construcciones, una mejor coordinación entre el equipo del proyecto, que deriva en la reducción de órdenes de cambio y en el cumplimiento de las fechas estipuladas en el calendario de obra.

Es por esto que no resulta sorprendente que el Comisionamiento sea un proceso mandatorio en diversos sistemas de certificación verde como LEED, WELL o BREEAM; y que cada vez se busque incluirlo en  más códigos de construcción; por ejemplo, en los reglamentos de construcción de Florida, California, Nueva York y otros estados de la unión americana, así como en el Código Internacional de Construcción (IBC, por sus siglas en inglés), el Código Internacional de Conservación de Energía (IECC, por sus siglas en inglés); y en el caso de México, en el Código de Conservación de Energía para las Edificaciones de México (IECC-México).

No resulta sorprendente que el Comisionamiento sea un proceso mandatorio en diversos sistemas de certificación verde como LEED, WELL o BREEAM; y que cada vez se busque incluirlo en más códigos de construcción

La razón por la que implementar un proceso como éste puede resultar tan beneficioso tiene que ver con que el proyecto incorpora una metodología de verificación de calidad para los sistemas que lo integran, principalmente el sistema de HVAC&R, eléctrico, iluminación, agua caliente y energías renovables; aunque cada vez es más común el Comisionamiento del sistema de PCI, control de accesos, IT, hidrosanitario, transporte vertical y la envolvente (cabe mencionar que también existe el Comisionamiento para equipos de proceso, como líneas de producción, equipos de manufactura, entre otros).

La verificación de calidad de estos sistemas se realiza a lo largo de todas las etapas del proyecto, desde el prediseño hasta la operación. Es esta intervención oportuna y continua evaluación lo que le da su efectividad al proceso.

Idealmente, el Comisionamiento inicia antes de comenzar el desarrollo de ingenierías, con una reunión entre el propietario y la persona encargada de dirigir el proceso de Comisionamiento, a la cual se le denomina Autoridad de Comisionamiento (CxA). El CxA debe ser una persona desinteresada del equipo de diseño y construcción, ya que su principal objetivo será cuidar los intereses del propietario, de tal forma que si llega a encontrar alguna deficiencia u omisión en el proyecto no tenga reparos en hacerlos notar para que el responsable dé una solución.

El objetivo de la reunión inicial entre el propietario y el CXA es el desarrollo de un documento escrito que plasme los requerimientos que se tienen para el proyecto, como son criterios de ocupación, requerimientos de automatización, garantías requeridas, expectativas de eficiencia energética, requerimientos acústicos, calendario de obra, presupuestos asignados, normativa que se debe cumplir y demás.

Se debe aclarar qué criterios son absolutamente necesarios, cuáles son deseables, opcionales o intercambiables. Al final, se deberá contar con un documento completo y claro que sirva como punto de referencia para el trabajo que desarrollarán diseñadores, contratistas, personal de O&M y demás miembros del equipo de proyecto.

Este documento de requerimientos del proyecto, conocido como OPR, guiará el proceso de Comisionamiento. Durante la etapa de diseño se revisará que los sistemas propuestos cumplan con el OPR; por ejemplo, en el caso del sistema de aire acondicionado se verificará que los controles propuestos, la eficiencia del equipo, el flujo de aire de renovación, la temperatura, el mantenimiento esperado, el costo del sistema, sea congruente con los criterios del OPR.

El CxA también deberá verificar durante esta etapa que haya una correcta integración entre sistemas; es decir, que no haya un difusor de aire acondicionado en donde debiera estar un detector de humo, que las trayectorias de ductos o tuberías no se intersecten, que los cálculos se realicen considerando la última versión del proyecto (por ejemplo, el cálculo de cargas térmicas para el sistema de HVAC debe reflejar los ahorros derivados de utilizar iluminación eficiente o aislamiento térmico). Es también durante el diseño cuando se verificará que los sistemas cuenten con todos los componentes y accesorios para su correcta operación, previniendo así aditivas o cambios de último momento.

Es importante que el CxA tenga comunicación directa con el propietario para que lo pueda mantener informado de las desviaciones o deficiencias que se van presentando en el proyecto, de esta manera será más fácil que los diseñadores o contratistas implementen las recomendaciones del CxA. El no atender las recomendaciones hechas por el CxA durante la revisión de documentos constructivos puede ser un problema que impida obtener el máximo beneficio del Comisionamiento. Una encuesta de mercado elaborada por el Building Commissioning Association en 2018 reportó que tan solo 46 % de las observaciones de Comisionamiento hechas a los documentos constructivos son incorporadas al proyecto.

El no atender las recomendaciones hechas por el CxA durante la revisión de documentos constructivos puede ser un problema que impida obtener el máximo beneficio del Comisionamiento»

En la etapa de construcción se verificará que la instalación de los sistemas se realice respetando los documentos constructivos y en cumplimiento con los criterios especificados en el OPR. El CxA realizará visitas periódicas al proyecto en donde corrobore, por ejemplo, que las trayectorias de ductos y canalizaciones sean correctas, que se instalen los equipos y accesorios especificados, que se sigan los protocolos para el cuidado de la calidad del aire interior, entre otros.

Las visitas a obra por parte del CxA son fundamentales para poder observar detalles en la instalación de los sistemas no perceptibles una vez que el edificio ha sido terminado, un ejemplo sería la verificación de la correcta instalación del aislamiento térmico en muros, en concordancia con lo considerado para el cálculo de cargas térmicas del sistema HVAC&R. Estas visitas también permiten detectar y corregir oportunamente deficiencias en la instalación de los sistemas, como puede ser una incorrecta colocación y sellado de ductos, evitando el retrabajo que implicaría realizar su corrección una vez que la instalación ha finalizado.

Las últimas actividades del Comisionamiento durante la etapa de construcción tienen que ver con una serie de pruebas que se realizan a los sistemas y sus componentes para verificar su funcionamiento. Las pruebas de Comisionamiento se dividen en prefuncionales y funcionales.

Las pruebas prefuncionales buscan verificar que los componentes de los equipos y sistemas han sido instalados de manera correcta y están listos para su arranque. En el caso de ductos de HVAC&R esta verificación incluiría una inspección para corroborar que estos han sido instalados con base en la normativa especificada, la revisión de reportes de pruebas de fuga de aire en ductos, verificación de la operación de compuertas, de la colocación de rejillas y difusores. 

Una vez que las pruebas prefuncionales han sido aprobadas y el sistema está completamente instalado, se procede a la ejecución de pruebas funcionales. Ésta será la verificación final para asegurarnos de que los sistemas operan correctamente y, por lo tanto, se le puede hacer su entrega al propietario. Las pruebas funcionales consisten en la revisión de las diferentes secuencias de operación de los sistemas, para verificar que los tiempos de reacción y parámetros de operación cumplen con lo estipulado en el OPR y documentos de diseño. 

Finalmente, como parte del Comisionamiento se incluye la verificación del entrenamiento al personal de operación y mantenimiento, para asegurarnos de que estos cuenten con las herramientas necesarias para mantener la eficiencia y durabilidad de los sistemas. Un continuo monitoreo y verificación de su operación será fundamental para mantener los beneficios alcanzados. 

No es casualidad que el Comisionamiento sea considerada la estrategia más efectiva para reducir el consumo de energía, costos y emisiones de gases efecto invernadero, conlleva un arduo trabajo de verificación a lo largo de toda la obra e involucra a los principales miembros del equipo de proyecto: arquitectos, ingenieros, contratistas, gerencia de proyecto, personal de O&M y fundamentalmente al propietario; todos ellos coordinados por la figura de la Autoridad de Comisionamiento, que aunque nos hemos referido a una persona en singular, idealmente esta persona tiene un equipo detrás. Sería complicado imaginar a una persona que tenga todos los conocimientos necesarios para poder realizar una correcta verificación del sistema de HVAC&R, iluminación, eléctrico, automatización, y demás sistemas.

En realidad, más allá de las reducciones en costo o consumo de energía, debemos ver al Comisionamiento como la herramienta con la que contamos en la actualidad para asegurar al propietario que verdaderamente los sistemas que integran al edificio van a cumplir con sus expectativas.  Al mismo tiempo, el Comisionamiento debe ayudar a diseñadores y contratistas a entender claramente las expectativas del propietario y los parámetros bajo los cuales su trabajo será juzgado, evitando malentendidos, costos adicionales y reduciendo el número de llamadas para hacer efectivas garantías.

Natalia Pineyro

Natalia Pineyro es egresada como arquitecta por la UANL, con una Maestría en Arquitectura: Diseño y Conservación de la Energía por la Universidad de Arizona, acreditada como Autoridad de Comisionamiento por la Universidad de Wisconsin y como profesional LEED BD+C y O+M por el GBCI.
Lleva más de 10 años involucrada en el ramo de la construcción sustentable, habiendo participado en la certificación de más de 15 proyectos LEED en las áreas de Comisionamiento, modelado energético y consultoría sustentable.
Contacto: [email protected]